“No podéis imaginaros esta experiencia a través de mis más humildes palabras, os invito a que vayáis a probarlo sin dudar un segundo!”

-Carlota, en Google

una Experiencia DIFERENTE EN COMIDA DEL MAR

Desde el primer momento que entras y eres recibido con una sonrisa, vas descubriendo poco a poco la sensación de estar en una playa, mientras más te vas adentrando al lugar es inevitable sentir su calidez, tanto por su iluminación y música como por su personal. 

Al centro del restaurante encuentras una cocina abierta que inspira confianza y despierta curiosidad. Al llegar al salón principal, uno se encuentra con un ventanal que da a una linda terraza abierta y reafirma el sentido de estar en un espacio natural, vaticinando así una buena experiencia culinaria.

Una vez sentado en mesa se nota el cuidado en todos los detalles, como por ejemplo la elegancia en su carta o vajilla o en las salseras auténticas tan simpáticas llamadas molcajetes, las cuales te son explicadas por el camarero de menor a mayor intensidad de sabores. 

Lo mejor sería ponerse en manos de las recomendaciones de los camareros basándose en tus preferencias; sin embargo, podemos adelantarte las cosas que no puedes perderte, como las tostadas de atún, las cuales son unas tostadas de maíz y ajonjolí, con mayonesa al chipotle y finas láminas de atún marinado en cítricos, con puerro frito y aguacate. 

También se puede elegir como entrada opción de tacos, ya sea de pescado estilo Ensenada, o de camarón en adobo, e incluso existen opciones vegetarianas y veganas, haciendo la carta mucho más rica y variada. 

El gran protagonista es el pescado a la talla abierto en mariposa con dos salsas deliciosas y muy coloridas, una es verde de perejil y la otra de un adobo de achiote (condimento de color rojo rubí muy mexicano) servido con frijoles refritos y tortillas calientes para que uno mismo se prepare sus tacos rascando y degustando hasta el último trozo de pescado haciéndolo incluso divertido. O quizás se prefiera probar un pulpo con salsa negra y boniato que está exquisito. 

Para cerrar con broche de oro puedes elegir cualquier postre que van desde el pastel de tres leches o uno muy especial como el de cajeta, sin duda uno de los consentidos es la piña marinada al tequila y puesta a la plancha con espuma de coco y cítricos.

Todo lo anterior puede ser degustado con una buena gama de tequilas o mezcales, o si lo prefiere con una buena margarita o cualquiera de los cócteles de la casa, esto sin menospreciar la bien cuidada carta de vinos blancos y tintos escogidos especialmente para esta oferta gastronómica.

La experiencia en Maro Azul hará que los sentidos exploten, provocando que uno regrese una y otra vez. Esta innovadora propuesta en el Eixample se está convirtiendo en un referente especial para todo Barcelona. No puedes dejar de vivirlo en carne propia.

  • “Todo top! El ambiente, el personal, la comida ha sido una experiencia brutal…”

    -Elena, en thefork

  • “Una experiencia de gusto y sensorialidad. Muy recomendable.”

    -Antonella, en Facebook

  • “La mejor comida mexicana en la ciudad. Una experiencia que te dejará boquiabierto”

    -Andrew, en Tripadvisor

  • “Una experiencia fantástica. La comida muy buena. Especial mención al pescado a la talla, es espectacular…”

    -Alicia, en Google

  • “Muy recomendable una experiencia única y diferente. El trato excelente siempre recomendando platos para crear una experiencia gustativa espectacular”

    -Nuria, en thefork

  • Experiencia impresionante, platos con sabores muy bien conjuntados. No perderse las tostadas de atún”

    -YorYo, en Google